* Artículo de opinión publicado en el periódico Aquí
Marifé Esteso
Presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Alicante
Como tantos otros aspectos de nuestra vida que se han visto profundamente alterados por la pandemia que nos ha tocado vivir, el sector de la vivienda en Alicante está volviendo a la normalidad. Después de un año 2020 marcado por el confinamiento, el cierre de las agencias inmobiliarias durante muchos meses y las importantes restricciones a la movilidad, en 2021 estamos luchando para volver a una situación parecida a la que teníamos antes de la aparición del coronavirus.
Sin embargo, debemos denominar a la nueva situación como “nueva normalidad”, porque hay aspectos que han cambiado notablemente. En primer lugar, el cliente nacional representa ahora un factor muy importante en Alicante, la provincia con una mayor proporción de ventas de vivienda a extranjeros de toda España. Las restricciones a los viajes internacionales experimentadas hasta ahora no han facilitado la llegada de ciudadanos de otros países para visitar viviendas y cerrar operaciones, por lo que en los últimos meses han sido los ciudadanos de Madrid, Castilla la Mancha o Aragón quienes han contribuido al despertar del mercado.
Alicante, tanto capital como provincia, cuentan con un atractivo especial para vivir o ser elegidos como destino de segunda residencia, lo que ha permitido atraer a personas de toda España en los últimos meses.
Tampoco es la misma la tipología de vivienda que busca quien llega hasta Alicante. Como consecuencia de la pandemia, los hogares con más demanda son los chalets, viviendas unifamiliares y áticos con terraza, inmuebles amplios y con espacios abiertos como jardines y terrazas. La pandemia ha motivado que muchos compradores prioricen el tamaño de la vivienda sobre la ubicación. Hay clientes con alto poder adquisitivo que antes buscaban viviendas de lujo en el centro y ahora buscan viviendas con espacio al aire libre en zonas más periféricas.
Los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria estamos convencidos de que ahora es un buen momento para la adquisición de una vivienda en la provincia de Alicante debido a la previsión del alza de precios en los próximos meses, los bajos tipos de interés, la alta tasa de ahorro de muchas familias durante la pandemia y la incertidumbre en torno a otros activos financieros.
Hasta ahora, el precio de los inmuebles se ha mantenido en niveles estables, especialmente si se compara con otros mercados europeos, aunque nuestra previsión es que la vivienda va a encarecerse desde finales de 2021 y durante 2022. Este hecho incidirá especialmente a las grandes ciudades y sus alrededores, así como a la costa, y menos en el interior y las zonas rurales de la provincia.
Además, tenemos confianza en que el cliente extranjero se recuperará de forma muy importante en los próximos meses si se mantiene la buenas situación sanitaria que hemos logrado alcanzar. Alicante sigue siendo un destino especialmente atractivo para los extranjeros, ya que los precios son mucho más competitivos en comparación con mercados como Alemania, Francia o Países Bajos, donde los precios han aumentado más y partían de niveles más elevados. Sólo necesitamos que la movilidad se recupere totalmente para que estos ciudadanos puedan llegar hasta aquí sin problemas, porque el atractivo de Alicante se mantiene e incluso ha aumentado gracias al auge del teletrabajo.
El hecho de que muchas empresas hayan instaurado el teletrabajo de forma permanente ha ampliado mucho el rango de compradores foráneos que pueden adquirir una vivienda en la costa alicantina para residir aquí todo el año. Es mucho más asequible y ofrece una mayor calidad de vida en estos momentos comprar una vivienda en Alicante que en muchas ciudades europeas. Nuestras excelentes comunicaciones aéreas y buenas infraestructuras tecnológicas permiten a muchos profesionales vivir aquí y acudir puntualmente a la sede de sus empresas o reuniones de trabajo. Vivir todo el año junto al mar con nuestro clima, gastronomía y altísima calidad de vida es un sueño que está al alcance de muchos más europeos gracias al teletrabajo.
De hecho, un reciente estudio internacional sitúa a Alicante como la segunda ciudad preferida a nivel mundial por los extranjeros para establecer su residencia y teletrabajar desde allí, lo que refleja el gran atractivo del destino. La irrupción del teletrabajo, que ha llegado para quedarse, ha supuesto un cambio muy importante en la venta de viviendas, pues las provincias costeras como Alicante pueden acceder a un tipo de comprador más joven, que anteriormente no se podía plantear trasladarse hasta la jubilación.
Además, respecto a 2022, desde el Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Alicante esperamos un repunte aún mayor de las ventas debido a la finalización del proceso de vacunación en toda Europa y el despegue de toda la economía que este hecho traerá consigo. En estos momentos merece mucho la pena comprar en Alicante, hay muy buenas oportunidades y, quien no se decida, quizás se arrepienta cuando acuda al mercado en 2022 ó 2023 por la subida de precios que se prevé.
