Los API de Alicante constatan un aluvión de solicitudes de alquiler de viviendas para acoger a los refugiados que huyen de la guerra en Ucrania

El Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Alicante ha constatado un aumento de las solicitudes de alquiler de viviendas para personas desplazadas por el conflicto bélico en Ucrania. Alicante, la provincia que registra un mayor número de ventas de viviendas a extranjeros en España, cuenta con una comunidad ucraniana significativa, a lo que se une la llegada de importantes grupos de refugiados en los últimos días. Además, ya hay empresas procedentes de Ucrania que se han instalado en Alicante lo que conlleva que sus trabajadores se instalen en la ciudad y haya que facilitarles viviendas.

Todos estos factores están contribuyendo a que numerosos ucranianos que han llegado a Alicante en las últimas semanas y que estén buscando con urgencia una vivienda en alquiler. En contrapartida, se han bloqueado muchas de las operaciones que estaban abiertas para la compra de viviendas por parte de ciudadanos rusos, ya que las sanciones impuestas han limitado su movilidad y han congelado sus fondos disponibles. Ya se han rescindido contratos de compraventa por no poder disponer de sus fondos en España o por no poder transferirlos desde Rusia.

La presidenta del COAPI de Alicante, Marifé Esteso, explica que ambos fenómenos se han producido en los últimos días debido al recrudecimiento del conflicto, y afecta especialmente a localidades como Calp, Altea, Torrevieja y la capital, aunque puede ir a más en las próximas semanas. “La evolución de la situación dependerá del curso del conflicto bélico, ya que un alargamiento de la guerra aumentará la llegada de refugiados y obligará a buscar alojamientos más estables a ucranianos que están actualmente con amigos o en centros de acogida”, indica.

Esteso recuerda que Alicante es un destino atractivo para las personas que escapan de la guerra porque muchos cuentan con familiares y amigos que ya residen aquí, conocen la provincia por estancias vacacionales anteriores o incluso tiene lazos personales a raíz de los programas de acogimiento a menores afectados por la explosión nuclear de Chernobyl. “Alicante siempre ha sido un destino de acogida para ciudadanos extranjeros, una provincia con un gran parque de vivienda y excelente clima con tradición de acogimiento a personas de todo el mundo. Ahora, es importante que tanto las administraciones, la sociedad y los propios agentes inmobiliarios hagamos un esfuerzo para ayudar a que puedan retomar sus vidas unas personas que están sufriendo y necesitan seguridad y tranquilidad para poder superar el trauma de un conflicto bélico”, indica.

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