22 de Mayo de 2015
Fuente: realestatepress.es
La reactivación incipiente tiene sus efectos sobre los datos de empleo, puesto que la construcción es uno de los sectores donde más se reduce la tasa de paro, aumenta el consumo de materiales de construcción, se conceden más hipotecas y empieza a moverse el mercado del suelo.
Los precios del suelo urbano se han ajustado más de un 45% desde máximos en este segmento y, en el balance de 2014, experimentaron una apreciación del 5,2% en el conjunto nacional, lo que refuerza la teoría de la estabilización del mercado.
Este avance, que se manifiesta sobre todo en las áreas de mayor actividad como Andalucía, Madrid, Cataluña, Galicia y País Vasco, también ha derivado en una mejora de las transacciones. Así, durante el ejercicio de 2014 el número de ventas alcanzó un total de 15.900 transacciones, un 9,2% más que en 2013, según datos facilitados por el Ministerio de Fomento.
El resto de indicadores del mercado también se ve afectado de manera positiva por el ritmo que marcan los fundamentos de la demanda, según apunta el estudio elaborado por BBVA Research.
La apertura del grifo del crédito en condiciones atractivas tras años de sequía está impulsando la actividad del mercado hipotecario y, según la fotografía del momento inmobiliario captada por BBVA, comienza a ganar dinamismo alentada por el tipo de interés fijo y la previsión de que el Euribor continúe evolucionando a la baja. Así, la contratación de hipotecas para la compra de viviendas se incrementó un 19% en febrero en comparación con el año anterior.
Por último, las buenas perspectivas también rodean al segmento de la construcción, donde las estadísticas vuelven a reflejar un aumento del consumo de cemento, así como del número de licencias para construir nuevas viviendas, cuya concesión de visados rompió con una racha de siete años negativa