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23 de Noviembre de 2011

Fuente: Real Estate Press, S.L.

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Así se recoge en el informe “Tendencias del Mercado Inmobiliario” que ha elaborado la Federación de Promotores de la Comunidad Valencia (Feprova), en el que han participado un centenar de empresas y agentes económicos de la Comunidad Valenciana.

Según su secretario general, Jesualdo Ros, la recuperación de la economía en esta comunidad autónoma no es posible sin la del sector inmobiliario.

Por ello, los empresarios de este sector coinciden en la necesidad de un cambio de estrategia por parte de las entidades financieras y de la administración.

Aunque el informe refleja que el sector inmobiliario “sigue paralizado”, la mayoría de los promotores inmobiliarios encuestados muestra su predisposición a iniciar nuevos proyecto a corto plazo, si se solucionan los problemas de crédito y las Administraciones publicas se adapten a la nueva situación.

De hecho, más del 50% de los encuestados han detectado “luz en el horizonte” y han manifestado su predisposición a iniciar nuevas promociones inmobiliarias, “siempre y cuando se garanticen el cumplimiento de dos variables claves para el sector”.

La primera, según el citado estudio, es que las entidades financieras faciliten financiación de operaciones inmobiliarias, especialmente a compradores.

“Los exhaustivos controles y limitaciones que se han impuesto a la banca, la han llevado a cerrar la puerta a nuevos proyectos”, ha dicho Ros, para quien la inseguridad de obtener financiación y préstamos hipotecarios impide poner en marcha nuevos proyectos inmobiliarios.

La segunda de las premisas es el apoyo de la administración, con una agilización de la tramitación, respaldo a nuevos proyectos y garantía de seguridad jurídica.

La mayoría de los encuestados coincide, según refleja el informe, en que la administración considera al sector “como una fuente de ingresos y no como un sector generador de empleo y dinamizador de la actividad económica”.

“No es de recibo que los tributos locales que gravan la actividad inmobiliaria, lejos de disminuir para incentivar la actividad en los momentos actuales, se revisen para seguir aumentando”, ha criticado Ros, quien ha asegurado que las escasas licencias de obras que se solicitan “siguen tardando meses, mientras que en otros países de la UE el tiempo se cuenta en días”.

Asimismo, las licencias de ocupación para poder entregar una vivienda “se alargan hasta cuatro meses” y se exige multiplicidad de informes técnicos.

Para Ros, la compra de vivienda en España por parte de ciudadanos no comunitarios con alto poder adquisitivo no puede competir con países como Reino Unido, Alemania, Francia e, incluso, Chipre, que facilitan estas operaciones con permisos de residencia automáticos, “mientras que aquí solo se les pone trabas”.

Otro problema apuntado por Feprova es la inseguridad política, ya que el sector teme iniciar un proyecto empresarial con fuertes inversiones y riesgos “para encontrarse con que a los tres años se bloquea por un cambio político o una opinión técnica”.

“En un mercado cambiante necesitamos certeza y seguridad desde el punto de vista burocrático”, ha subrayado Ros.

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